El mega proyecto de 740 millones atraviesa el canal de Chacao, uniendo Puerto Montt con la Isla de Chiloé. El MOP justifica esta gran inversión asegurando mayor conectividad, potenciar el turismo, mejor acceso a salud y educación. Pero detrás de toda esta inversión ¿Se verán realmente beneficiados los habitantes de la Isla de Chiloé o el empresariado?
Para comenzar a pensar en conectividad se deberían abordar mejoras dentro de la Isla de Chiloé. Hay muchos caminos en deplorable estado, como también pésima movilización. Islas que, estando habitadas, poseen escaza conectividad con el resto de Chiloé, consecuencia de ello: se presentan agravamiento de personas enfermases e incluso fallecimientos por la tardía llegada al servicio asistencial o por falta de equipamiento de él mismo. Con una pequeña fracción de lo que se gastaría en la construcción de este mega proyecto, podría solucionarse definitivamente el problema del agua potable que sufren comunidades de algunas zonas en el verano.
Es importante destacar, que no se ha hecho ningún estudio serio a cerca de como impactará los aspectos culturales, sociales y turísticos. Otro punto a considerar, es el impacto medio ambiental, éste se ha basado en un estudio hecho el 2002, que solo comprende el espacio físico ocupado por el puente y no el impacto que podría producir en el resto del archipiélago.
Por otra parte, si es salud y educación lo que se quiere mejorar ¿Por qué no construir hospitales mejor equipados y universidades en el interior de la Isla? De esta manera se tendría un acceso más expedito al servicio de salud y educación superior, sin la necesidad de salir de la Isla.
¿Qué piensan los habitantes de la Isla de Chiloé acerca del puente de Chacao?
Al parecer a las autoridades no les interesa la opinión de los chilotes, pues no se hizo una consulta ciudadana que considerara a la comunidad chilota; solo se consultaron a dos de las más de 100 comunidades indígenas de la zona, lo que ha provocado un fuerte rechazo por parte de las colectividades indígenas de Chiloé.
Tampoco se consideró el impacto que tendrá en los pueblos de Chacao y Pargua que sustentan su actividad económica en virtud de los transbordadores.
Las empresas mineras, forestales y salmoneras serían las más beneficiadas
La construcción del puente de Chacao beneficiaría de mayor manera el avance silencioso de las mineras, que buscan apoderarse de los sectores de Cucao, Chanquin, Chepu, Pumillahue, Toigoy, Mar Brava, Guabún, entre otras, zonas con gran valor patrimonial y turístico. A las forestales que depredan árboles nativos y en su lugar plantan eucaliptos, secando la tierra y esteros, afectando así al ciclo del agua. Y a las salmoneras, que contaminan las costas de Chiloé.
Quienes presionan la construcción del puente son los empresarios, ya que el costo y tiempo de viaje sería mucho menor. De esta manera aumentan sus ganancias en desmedro de los habitantes de la Isla de Chiloé.
Rosa Burgos
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