Si bien el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) aclaró que las tres mujeres mapuche pertenecientes a la Alianza Territorial Mapuche, que se encuentran haciendo ocupación de la oficina ONU desde la tarde del jueves 26 de julio, disponen de todos los elementos necesarios para satisfacer sus necesidades básicas, el organismo no puede acceder a la solicitud de las mujeres mapuche, una de las cuales está con su hija de dos años.
En una reunión sostenida entre las mujeres y la UNICEF, ellas reiteraron al organismo internacional que la única condición para terminar con la ocupación y abandonar el lugar es que UNICEF y el Representante del Alto Comisionado de DD.HH. soliciten al Ministerio del Interior el retiro de las fuerzas policiales de las comunidades mapuche de la Región de La Araucanía, petición que esta fuera del ámbito de acción de organismo, según explicaron.
Tom Olsen, representante del organismo, enfatizó su rechazo a la ocupación y reiteró que no forzará el desalojo de sus oficinas.
Asimismo, mediante un comunicado público la entidad ONU difundió que han promovido y facilitado el ingreso de las doctoras Tania Muñoz y Javiera Corbalán, quienes han verificado el buen estado de salud de la niña que se encuentra en la ocupación junto a su madre.
¿Por qué UNICEF?
La Alianza Territorial Mapuche, mediante un comunicado donde relata los hechos de violencia hacia las y los niños mapuche baleado fuera del hospital de Collipulli, argumentando que el Comité de Derechos del Niño entiende que en situaciones de violencia que afecten a niños y niñas, donde los Estados deben asumir ciertas obligaciones especiales, no obstante, "en el derecho internacional de los Derechos Humanos, los niños y niñas mapuche víctimas del delito de lesiones graves tienen un estatuto de protección aún mayor, lo que simplemente agrava el reproche y la antijuridicidad el acto delictivo de autos: el Convenio 169 de la OIT en el artículo 3º ordena que “No deberá emplearse ninguna forma de fuerza o de coerción que viole los derechos humanos y las libertades fundamentales de los pueblos interesados, incluidos los derechos contenidos en el presente Convenio”.
Agregan que "con estos antecedentes ONU y Unicef tienen una oportunidad importante de ser un aporte concreto en la defensa de los derechos humanos y de las niñas y niños, pero el día de hoy en una pobre declaración han puesto su atención en lo que han “facilitado” en esta ocupación como la utilización de internet, televisión, agua caliente y un par de colchonetas, desentendiéndose nuevamente del tema primordial y relevante".
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