Peonetas
de la Coca Cola se querellan por subcontratación abusiva
Alrededor
de 800 trabajadores subcontratados, en al menos 15 empresas,
agrupados en Federación Nacional de Peonetas de Coca Cola
(Fenasipec)
demandaron a Embotelladora Andina por simulación laboral. La primera
instancia legislativa fue en 2008 en el Juzgado de Letras de San
Miguel, en donde se acogió la demanda. Durante las siguientes
semanas esperan finalizar el proceso judicial con el fallo de la
cuarta sala de la Corte Suprema, el cual significaría un hito para
los trabajadores del país.
Por
cerca de cuatro años, los peonetas de la Coca
Cola
han “luchado” por ganar este juicio que evidencia una
problemática en Chile
de
la cual no hay estudios institucionales, la subcontratación. Hugo
Miranda,
director de la Fenasipec,
contó que todo el mundo les dice que esta travesía es una “utopía”
debido al poder que tiene la empresa. Andina es la tercera mayor
embotelladora de The
Coca-Cola Co.
en Latinoamérica,
la cual durante 2010 generó ventas por $888.714 millones.
Sin
embargo, las ganas y perseverancia de los peonetas los ha llevado a
llegar a la última instancia judicial para lograr su meta, ser
empleados directos de Andina. Gracias al grado de organización de
este sindicato, además de Santiago,
se han sumado afiliados de Melipilla,
Rancagua
y Valparaíso,
donde el “patrón” es (Embonor).
Además, los peonetas han visitado a trabajadores de La
Serena
y San
Fernando,
para compartir modos de organización y experiencias.
Gerardo
Foquett,
secretario de la Fenasipec, quien lleva 20 años trabajando como
peoneta, dijo que ganar este juicio significaría “terminar con los
subterfugios legales que muchas empresas y rubros tienen; seríamos
un precedente”. En la actualidad la mayoría de las grandes
empresas de Chile trabaja por medio de la subcontratación, situación
que según la OIT
(Organización
Internacional del Trabajo)
es un indicador de precariedad. En 2004, 74,8% subcontrataban,
mientras que el 58,5% de las medianas lo hacían (ver anexo). Gustavo
Godoy,
presidente de la federación, quien lleva 15 años en el oficio,
manifestó que esto sería un “precedente para el obrero chileno
porque la mitad del país trabaja como subcontratado”.
Foquett
aseguró que entre los perjuicios que perciben al ser subempleados
está la desigualdad en sueldos, por ejemplo, y la falta de unidad
sindical. Una de sus principales demandas ha sido emparejar los
salarios de acuerdo a su oficio, el cual es único; “si todos
fuéramos de la misma mandante sería distinto, tendríamos más
fuerza”, explicó. Esto se asocia al bajo porcentaje de
sindicalización en el país, el cual es de 11,7% según un estudio
de la Dirección
del Trabajo.
‘CONFLICTO
DE INTERÉS’ EN LA ÚLTIMA INSTANCIA JUDICIAL
La
problemática que asalta a los demandantes es que quien preside la
sala cuatro de la Corte
Suprema,
es Patricio
Valdés Aldunante.
Ministro judicial que tiene un extenso currículum relacionado a la
gran empresa, lo cual según los trabajadores genera un “conflicto
de interés” al decidir en casos de justicia laboral y previsional.
Valdés
entre 1971 y 1975 fue gerente de la inmobiliaria de la Sociedad
de Fomento Fabril
(Sofofa); en 1979, gerente general de la misma entidad gremial; entre
1985 y 1995 director de la AFP
Concordia;
y entre 1988 y 1990 fiscal de la Comisión
Chilena del Cobre
(Cochilco).
Rafael
Carvallo,
presidente de la Asociación
Gremial de Abogados Laboralistas
(Agal),
recordó que Valdés también fue secretario de la Asociación
Latinoamericana de Industriales
y representante de los empresarios en conferencias de la OIT. Ante
ello, aseguró a La
Nación
que no parece “apropiado que una persona con estos antecedentes
profesionales presida la sala laboral del máximo tribunal”.
Los
peonetas ya superaron tres instancias legislativas, el juicio simple,
la Corte
de Apelaciones
y el Tribunal
Constitucional.
Ahora sólo les falta esperar el pronunciamiento de la Corte Suprema,
en donde según Foquett tienen todas las “ganas y el positivismo”
de que les irá bien.
Según
la abogada de los trabajadores, Guacolda
Salas,
una de las pruebas más fehacientes de que Embotelladora Andina
debería ser el directo empleador, es que son propietarios de la
empresa que maneja los camiones que distribuye los bebestibles.
Además de ello, los repartos, los pedidos, las facturas y los
depósitos en los camiones Brink
que
realizan los peonetas son a nombre de Andina.
CONDICIONES
LABORALES QUE MEJORAR
La
Fundación Sol
mide la Tasa de Desempleo Integral (TDI), la cual incluye el
desempleo oculto y el desempleo por subempleo. Dicho índice hace que
los desocupados aumenten en un 81% y que la tasa de desempleo sea de
12,8%, mucho más del 7,5% registrado por el Gobierno. La
investigación muestra que entre enero-marzo 2010 y mayo-julio 2011,
el subempleo se ha incrementado en 25%, lo cual ha sido uno de los
“factores centrales para explicar la disminución en la tasa de
desempleo oficial registrada durante este año”.
En
la misma publicación, se indica que la Nene
(Nueva
encuesta nacional de empleo) del Instituto
Nacional de Estadísticas
(INE), registró que la calidad del empleo en Chile es “mala”:
Sólo un 38,9% del total de ocupados y un 52,8% de los asalariados
presentan un empleo protegido, vale decir, con contrato escrito,
indefinido, liquidación de sueldo y cotizaciones para pensión,
salud y seguro de desempleo.
Por
Estefani
Carrasco Rivera
Foto
Fenasipec
El
Ciudadano