El 21 de febrero de este año fue asesinado de un balazo en la cabeza el dirigente sindical Juan Pablo Jiménez,al interior de AZETA, la empresa en que trabajaba. Dos días después la PDI, la Fiscalía y el Gobierno declaraban que el caso estaba resuelto y que la muerte de Juan Pablo se debía a una “bala loca”.
Hoy, a más de un mes de estos hechos, se acusa a un joven de 16 años de ser el responsable de haber disparado la “bala loca” que mató a Juan Pablo Jiménez. La única persona que lo indica como autor del disparo es un testigo protegido, cuya identidad no conocemos, y que declara que no presenció ningún tiroteo, pero que se lo contaron. No confiamos en las declaraciones de este testigo y cuestionamos el actuar de la Fiscalía Sur pues creemos que ésta sólo trata de hacer “calzar” los hechos con la versión inicial e irresponsable de la bala perdida, que se planteó a dos días de este asesinato.
El Ministerio del Interior es querellante en este caso y si avala la tesis que sostiene la Fiscalía Sur se estará haciendo parte y cómplice de este montaje.
Denunciamos además al gobierno y al Estado chileno por la brutal represión que descarga a diario en contra de trabajadores, estudiantes y mapuche.
Saludamos fraternalmente el heroico paro de los Portuarios, especialmente al Puerto de Mejillones; y también las movilizaciones de los trabajadores del cobre, tanto de la mina Radomiro Tomic,como de las próximas paralizaciones ya programadas.
Es en medio de estas importantes movilizaciones, que tanto preocupan a los empresarios y al gobierno, que la Fiscalía Sur “resuelve” el caso del dirigente sindical Juan Pablo Jiménez como una manera de acallar a los que luchan y que salen a la calle para decir NO MAS TRABAJADORES MUERTOS, NO MAS REPRESIÓN
NINGÚN MONTAJE OCULTARÁ LA LUCHA DELOS TRABAJADORES DEL PAÍS
VIVA LA LUCHA DE LOS MINEROS Y LOS PORTUARIOS
VERDAD Y CASTIGO POR JUAN PABLO JIMENEZ
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