El 13 de Junio del 2013 durante una protesta estudiantil, una joven encapuchada ataca con una bomba molotov a un piquete de las fuerzas represivas.
Las imágenes son grabadas desde un edificio por parte de la policía secreta de la DIPOLCAR, el camarógrafo policial sigue a la encapuchada hasta cuando ella se cambia completamente de ropa tras unos arboles alejada de los disturbios.
Horas después la joven es detenida en una incursión policial a la toma de la cede central de la Universidad de Chile, acusada solamente por desordenes al encontrarse en una universidad tomada. Días después y ante las criticas por el violento actuar policial en la incursión a la Universidad la policía “desclasifica” estas imágenes para justificar las golpizas.
La prensa muestra una y otra vez las imágenes, la individualización de la compañera sobrexponiéndola al escarnio publico titulándola como “la rubia encapuchada”, además de hacer publico su historia y perfil.
Recién el 7 de Julio del 2013, la intendencia de Santiago se querella contra la compañera acusándola bajo los delitos de porte de artefacto incendiario y desordenes públicos en el Séptimo Juzgado de Garantía.
¡Solidaridad con la compañera Giuria Muñoz!
¡A frenar las campañas mediáticas contra los compañeros participes en la lucha callejera!
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