Extensas jornadas de trabajo, bajas remuneraciones, escasa cobertura de seguridad social, alto nivel de incumplimiento de las normas laborales y un menor reconocimiento legal de nuestros derechos laborales, es la situación que denuncian las trabajadoras y trabajadores de casas particulares en Chile.
Hace dos años que Chile firmó a favor del Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Dicho Convenio permite avanzar en garantía, derechos y protección social de las trabajadoras y trabajadores domésticos. Éste obliga al Estado chileno a respetar, promover y hacer realidad los principios y derechos fundamentales en el trabajo: libertad sindical, reconocimiento efectivo del derecho de negociación colectiva, eliminación de la discriminación en materia de empleo y ocupación; y garantía de jornadas de trabajo en igualdad de condiciones.
Más allá de firmar, el Estado de Chile no ha hecho nada que cambie la situación de las trabajadoras y trabajadores de casas particulares. El mismo año del Convenio llegó a la Cámara el Proyecto de Acuerdo 473, el cual solicita al Presidente de la República iniciar el proceso de ratificación parlamentaria del Convenio 189 de la OIT, siendo aprobado con 48 votos a favor. Hasta hoy el Gobierno no responde ante el proceso.
Ruth Olate, Presidenta del Sindicato de Trabajadoras de Casa Particular (SINTRACAP), cuenta, “nosotras intentamos muchas veces tener conversaciones, de hecho enviamos cartas como sindicato y en forma conjunta con la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) y la misma comisión del trabajo de la Cámara de Diputados envió en su momento una misiva solicitando el envío del proyecto para su ratificación, pero en ningún caso ha existido respuesta o alguna voluntad política por parte del Gobierno”.
Junto con esto existe otro proyecto de Ley respecto a la modificación de jornada, descanso y composición de la remuneración de los trabajadores de casa particular, sin embargo éste no cumplía con el Convenio 189 y los emplazamientos del SINTRACAP. Actualmente el proyecto está trabado gracias a la intervención del sindicato, “decidimos trabar el proyecto de Ley de la jornada laboral y le colocamos tres indicaciones: una reforma de cinco por dos en la jornada laboral de las trabajadoras puertas adentro; exigencia de una fiscalización del contrato, pidiendo que éste sea entregado en la Inspección del trabajo; y la ratificación del Convenio 189 de la OIT”, relata Ruth Olate, quien agrega que aún así todavía no hay respuestas antes sus exigencias.
Este domingo 24 de noviembre SINTRACAP realizará una marcha a las 10.00 hrs desde Av. Manquehue con Av.Apoquindo hasta Escuela Militar. A la actividad ha adherido La Alzada, Acción Feminista Libertaria, movimiento al cual pertenece la reciente Presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (Fech), Melissa Sepúlveda. La Alzada lleva trabajando hace unos seis meses junto a las trabajadoras y ha hecho un llamado de solidarización con las compañeras en la lucha contra lo que llaman su explotación.
Por María Jesús Ibáñez C.
El Ciudadano / Clarín
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