El día lunes 26 de octubre mientras nos encontrábamos en “La Ranita” con nuestros niños y niñas realizando uno de los talleres proyectados para ese día, nos informamos a través de un periódico de circulación comunal, El Lider, de una nueva orden de demolición emanada por la siniestra alcaldesa Natalia Carrasco, para nuestro espacio comunitario, así como también a las tomas II y III, colindantes a nosotros y que albergó a unas 60 familias, muchas de las cuales abandonaron la lucha por una vivienda al sufrir el acoso sistemático de parte de las autoridades de turno, mediante la “visita” de policías y personeros municipales que han llegado hasta las casas de algunos vecinos con la finalidad de alterar psicológicamente la vida de estos pobladores manifestándoles que pronto serán desalojados, “que ya se licitó para la demolición de sus viviendas”.
Una vez más queda en evidencia que la postura de las autoridades del Estado, es la de defenderlos intereses de unos pocos en función de perpetuar esta injusta sociedad. Aquí lo que importa es que unos pocos vecinos veraneen cómodamente, sin tener que despertarse viendo la pobreza frente a sus casas. No importan las necesidades de las personas que nada tienen o que éstas deban pagar arriendos exorbitantes por una casa o que la Iglesia Católica, dueña de uno de los predios, como otras instituciones tanto públicas como privadas, especulen con terrenos que por más de 60 años han estado tirados como verdaderos vertederos.
Lo de Carrasco no sólo es una clara declaración de hostilidad hacia quienes buscan resolver su problema habitacional de manera directa y sin las conocidas postulaciones burocráticas y corruptas propias de los políticos; no olvidemos el actuar del deshonesto ex alcalde José carrasco, padre de Natalia, por el que hoy la justicia pide 12 años de cárcel acusándolo de fraude al fisco, al generar un millonario negocio encarpado en la construcción de viviendas sociales (a saber Marina 1 y 2).
Su nuevo y ya reiterativo decreto de demolición, demuestra un constante proceder represivo, con un marcado servilismo hacia las lógicas especulativas de inmobiliarias y empresas depredadoras de expansión turística, que ven en el humedal que ocupamos un posibilidad de aumentar sus riquezas y la de su despreciable entorno social a costa de la muerte de los ecosistemas, no olvidemos la incursión cívico-policial realizada el 26 de mayo de 2015 a “La Ranita”, en que un fuerte contingente de fuerzas especiales de carabineros, provistos de maquinaria pesada y blindados policiales, vinieron a demoler, destruir y robar una serie de espacios comunitarios que cobijaban talleres, comidas, cocina, baño o de disfrute recreativo, los mismos nuevamente construidos y que ahora pretende nuevamente arrasar.
Reiteramos nuestra decisión de mantenernos en la ocupación del terreno, convencidos de que con nuestra acción seguiremos recuperándolo del abandono que lo vio convertirse en basural. Así también liberamos este lugar de la especulación y avaricia inmobiliaria, dando pequeños pasos hacia la realización de un espacio comunitario, autónomo, libre y en respeto con la naturaleza.
Por último, a todas y todos quienes solidarizan con nuestra decisión y comprenden nuestra forma de lucha, les agradecemos su apoyo y reiteramos nuestro firme empeño en resistir en la ocupación, no tenemos miedo a las amenazas y acciones represivas del estado a través de su careta municipal, no nos interesa ceder el humedal a su extinción lucrativa que sabemos a quienes favorecerá. Nos demolieron ya una vez y nos levantaremos mil veces más. No a la especulación inmobiliaria. No a un humedal convertido en vertedero o en bonitos resort de temporada. Llamamos a todas las mentes libres y salvajes a continuar en la recuperación de nuestras vidas emancipadas del capital y sus lógicas. Ocupa y resiste!!!!
Piedra del Trueno, Punta de Tralca. “La Ranita”, Octubre 28, del 2015.
Imágenes y links demolición 26 Mayo 2015
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Noticiero chilevisión
Cooperativa
Demolición Youtube
Entrevista y video pobladores toma II y III
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