El expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva participa en una protesta contra el presidente interino, Michel Temer, Sao Paulo, Brasil, 10 de junio 2016.
Lula declaró el martes que es posible salvar a la presidenta suspendida Dilma Rousseff porque su destino depende solo del voto de seis senadores.
"Hoy (...) para derrotar el impeachment es más fácil que antes. Porque antes la Cámara [de Diputados] estaba prácticamente controlada, después ocurrió la admisibilidad [del proceso de impeachment en el Senado] y ahora Dilma está dependiendo de seis votos", dijo el expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva, en una entrevista con la Radio Jornal del estado de Pernambuco (noreste).
Si bien una mayoría de senadores votó a favor de abrir el proceso contra Rousseff, sus partidarios confían en poder revertir el resultado en la votación de la sentencia final si consiguen restar seis votos de los 54 requeridos para destituirla definitivamente.
Hoy (...) para derrotar el impeachment es más fácil que antes. Porque antes la Cámara [de Diputados] estaba prácticamente controlada, después ocurrió la admisibilidad [del proceso de impeachment en el Senado] y ahora Dilma está dependiendo de seis votos", dijo el expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva.
La sesión final sobre el futuro de la mandataria se celebrará entre el 25 y 27 de agosto, unos días después del fin de los Juegos Olímpicos que albergará Río de Janeiro.
Rousseff fue suspendida provisoriamente de sus funciones el 12 de mayo, después que el Congreso votara a favor de iniciar un juicio político en contra de la presidenta por manejo irregular de las cuentas públicas en 2014 y 2015.
Su vicepresidente y exaliado, Michel Temer —señalado como uno de los arquitectos del impeachment— la sustituyó de forma interina. Si Rousseff es destituida, Temer gobernará hasta el 31 de diciembre de 2018, año en que los brasileños elegirán un nuevo jefe de Estado en las urnas.
Lula da Silva, fundador del Partido de los Trabajadores (PT), reiteró que si le "provocan", se presentará como candidato presidencial en las próximas elecciones, pese a que está pensando en la jubilación. "Para que yo no sea candidato en 2018, a Brasil tiene que irle bien", afirmó.
Porque "si a Brasil le va bien, ¿para qué precisaría ser presidente nuevamente?", reparó. "Quiero volver a mi vida tranquila, con mi mujer, ¡tengo 70 años!", concluyó el exmandatario (2003-2010).
lvs/ncl/mrk
FUENTE: HISPANTV
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