La candidata demócrata a la Presidencia de EE.UU., Hillary Clinton, durante una convención de la Legión Estadounidense en el estado de Ohio (noreste estadounidense), 31 de agosto de 2016.
Hillary Clinton podría enfrentar un juicio político por el caso de sus correos electrónicos, pese a que ya no es secretaria de Estado de EE.UU.
“Uno de los secretos sucios en Washington es que la señora Clinton puede ser acusada ahora (…) un funcionario federal que ha tenido mala conducta en la oficina (instancia del Gobierno) no puede evitar la jurisdicción del Congreso sobre el juicio político, solo por no trabajar más allá”, reveló Tom Fitton, presidente de la organización conservadora de vigilancia Judicial Watch.
La misión de Judicial Watch es usar la Ley por la Libertad de la Información (FOIA, por sus siglas en inglés) y otras herramientas para investigar la mala conducta y litigios de los funcionarios gubernamentales y hacer rendir cuentas a los políticos y funcionarios públicos que se dedican a actividades corruptas.
Uno de los secretos sucios en Washington es que la señora Clinton puede ser acusada ahora”, dice Tom Fitton, presidente de la organización conservadora de vigilancia Judicial Watch.
En otro momento de sus declaraciones durante la entrevista que concedió al diario británico Daily Mail publicada el miércoles, Fitton aseguró que en caso de que el Senado estadounidense condenara a la candidata demócrata a la Presidencia de EE.UU., “la sanción sería la inhabilitación para su futuro puesto gubernamental”.
El también autor del libro ‘Casa Limpia’, con el subtítulo ‘La exposición de secretos y mentiras de nuestro gobierno’, indicó que la alta probabilidad del triunfo de Clinton en los comicios, según los sondeos, no significa que no habrá una investigación criminal. “Puede ser más probable”, agregó.
Asimismo una última serie de correos electrónicos obtenida por el grupo Judicial Watch , pone de relieve intercambios entre altos funcionarios del Departamento de Estado que trabajaban con Clinton y altos responsables de la fundación.
En caso de que se llevara a Clinton a juicio político, esta tendría una experiencia similar a la su esposo Bill Clinton –expresidente estadounidense– que el 19 de diciembre de 1998 le abrió la Cámara de Representantes por dos cargos, uno de perjurio y otro por obstrucción de la justicia.
El escándalo de los correos de Hillary Clinton ha ofrecido en los últimos meses una oportunidad a sus adversarios para atacar a la aspirante demócrata con acusaciones como ocultar información y poner en riesgo los secretos del país.
Por su parte su rival republicano, Donald Trump, ha llamado a un fiscal especial para investigar "de inmediato" a Clinton. El magnate neoyorquino en un caso reciente urgió a los hackeadores rusos a publicar más emails de su rival demócrata.
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FUENTE: HISPANTV
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