Dos bombarderos de la Fuerza Aérea de China, incluidos un Xian H-6 (izda.), y un Su-30.
La Fuerza Aérea de China asegura que el vuelo de sus aviones de combate cerca del espacio aéreo nipón fue una maniobra en consonancia con ‘leyes internacionales’.
El viernes, China llevó a cabo un ejercicio militar por seis cazabombarderos en el estrecho de Miyako, en la prefectura nipona de Okinawa. Cuatro bombarderos Xian H-6 sobrevolaron Miyako, al sur, hasta Okinawa, en dirección al mar de la China Oriental. Paralelamente, se registraron dos Su-30 chinos, inicialmente en dirección opuesta, pero cerca de Miyako, que dieron un giro y también se dirigieron hacia el mar de la China Oriental.
Japón reaccionó entonces al ejercicio chino con un vuelo de los aviones de guerra de la Fuerza Aérea de Autodefensa de Japón (JASDF, por sus siglas en inglés), aunque confirmó que no registró ninguna violación de su espacio aéreo por parte del gigante asiático.
Un portavoz de las Fuerzas Aéreas chinas, Shen Jinke, ha considerado este domingo el ejercicio como una "práctica rutinaria", en consonancia con "las leyes internacionales. Para Jinkeuna, el vuelo que era parte de una maniobra militar planeada “no va dirigida a ningún país, región u objetivo específico: es algo legítimo, razonable y justificado”.
El pasado mes de septiembre, la Fuerza Aérea de China llevó a cabo otro simulacro similar cuando envió aviones militares al estrecho de Miyako, situado entre la isla homónima y la de Okinawa, en el Mar de China Oriental, escenario de una disputa territorial entre Tokio y Pekín por las islas Diaoyu/Senkaku. Las JASDF, a su vez, desplegaron sus aeronaves en modo de alerta.
La Fuerza Aérea de China dijo que era un simulacro de observación. En concreto, las fuerzas llevaron a cabo varios simulacros de reconocimiento y alerta temprana y simularon ataques contra objetivos marítimos, según fuentes chinas.
Las tensiones entre China y Japón se intensificaron en 2012 después de que el Gobierno japonés nacionalizara tres de dichas islas. Además, las partes se enfrentan a otros problemas en el mar de la China Meridional.
Pekín reclama como suyo casi un 90 % del territorio en litigio en el mar de la China Meridional, en especial las islas Spratly. Tokio no tiene ninguna reclamación en dicho mar, pero está preocupado por la influencia de Pekín en una región por donde pasan anualmente 5 billones de dólares en comercio, gran parte hacia y desde los puertos japoneses.
ftm/ktg/mkh/mrk
FUENTE: HISPANTV
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