Es difícil imaginar un hecho como el ocurrido hace 35 años en El Mozote y lugares aledaños. Familias enteras asesinadas, poblados reducidos a cenizas.
En El Salvador en 1981 alrededor de mil personas fueron asesinadas, incluyendo a cientos de niños y niñas, en lo que se considera uno de las masacres con mayor número de víctimas en la historia reciente de Latinoamérica. Treinta y cinco años después fue recordado ese triste episodio.
A Samuel López el ejército gubernamental también le mató a dos hermanas y sus sobrinos en lo que se conoce como la masacre de El Mozote, ocurrida en 1981 en el marco de la guerra civil. Para conmemorar este triste suceso se realizó un acto al que asistieron familiares de las víctimas, autoridades de gobierno y de organismos internacionales.
Justicia que no llega pues hasta ahora ninguno de los responsables por los casi mil masacrados ha rendido cuentas por sus acciones.
En el 2012 la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó al Estado Salvadoreño por los hechos ocurridos en El Mozote y le mandató reparar a los afectados. Su cumplimiento, aunque a medias, hizo posible que durante el acto conmemorativo fueron entregadas 21 osamentas a familiares de las víctimas del genocidio.
A 35 años el caso de El Mozote continúa impune, sin embargo, existe la esperanza de justicia después de que en octubre pasado un juez decidiera reabrir la acción judicial contra 10 mandos militares involucrados en la masacre.
Vladimir Chamorro, San Salvador.
akm/rba
FUENTE: HISPANTV
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