Este lunes hubo manifestaciones en diversos puntos del país, como Brasília, San Pablo y Porto Alegre, contra la enmienda constitucional que pretende congelar los gastos sociales por 20 años (PEC 241). La medida será puesta a votación en segunda instancia este martes (25) en la Cámara de Diputados.
En Rio de Janeiro, miles se reunieron en la Candelária y marcharon hasta Cinelândia contra la PEC 241, la enmienda constitucional impulsada por el gobierno de Temer.
En todo Brasil ya son más de 1.000 instituciones educativas ocupadas contra la PEC 241 y la reforma de la enseñanza esecundaria impulsada por Temer, lo que muestra que la lucha y la resistencia a los ataques está creciendo y tiene un potencial para frenar las medidas de los golpistas.
En las calles, esta resistencia también se viene expresando. Ayer desde las 17 horas los manifestantes comenzaron a reunirse en la Candelaria, en el centro de Rio, para engrosar este movimiento. Organizaciones de izquierda, sindicatos, centrales sindicales, trabajadores, estudiantes, componían el contingente que fue a las calles. Después de la marcha hasta Cinelândia, los manifestantes permanecieron reunidos y hubo discursos desde el camión de sonido.
La organización juvenil Faísca estuvo presente y Carolina Cacau, que fue candidata a concejal del MRT por el PSOL declaró para Esquerda Diário:
“En todo el país se ha mostrado la disposición de diversos sectores, en particular de la juventud, para poner en pie una gran lucha nacional que frene los ataques de los golpistas, que tienen por objetivo hacer que los trabajadores y la juventud paguen por la crisis. Las burocracias estudiantiles y sindicales se han puesto como un obstáculos, porque no organizan efectivamente las luchas. Hay ocupaciones en todo el país y necesitamos avanzar en una coordinación nacional para poder ampliar el alcance y efectividad de esta lucha. Aquí en Rio esa derecha golpista se expresa con Marcelo Crivella, cuyo partido, el PRB, votó unánimnemente a favor de la PEC 241. Los sectores que se expresan aquí hoy, trabajadores, juventud y los cientos de miles que votaron a Freixo, constituyen una fuerza social que puede avanzar en constituir una lucha capaz de frenar los ataques. Es este llamado el que queremos dejar a todos, para cosntruir una lucha que imponga que sean los patrones los que paguen por la crisis”.
Más de 1000 instituciones educativas en Brasil ocupadas por la juventud
Ya son más de 1.000 ocupaciones en todo Brasil entre escuelas, terciarios nacionales y provinciales y universidades. La juventud se viene poniendo en la línea de frente de la lucha contra la PEC241, la reforma de la enseñanza secundaria y todos los ataques del gobierno golpista.
El estado de Paraná, al sur de Brasil, viene siendo la vanguardia del proceso, con más de 800 escuelas ocupadas. En Minas Gerais, son 48 ocupaciones, entre ellas la de los estudiantes de UFMG, la universidad federal de ese estado, que tienen un edificio ocupado. Son cerca de 995 escuelas y terciarios federales ocupados, 73 universidades, 3 núcleos regionales de educación y la Cámara Municipal de Guarulhos.
La autoorganización de los estudiantes, la movilización, y todas las formas más creativas de debate y acciones, con nuestros métodos de lucha como los paros, huelgas y ocupaciones, pueden consolidar y expandir esa resistencia que gana fuerza en Paraná y en diversos estados del país.
Esta enmienda constitucional constituye el primer gran ataque de la agenda del gobierno golpista luego de la consolidación del golpe, y viene siendo tratada como una prioridad a través de la que se pretende aumentar el peso de la crisis sobre las espaldas de los trabajadores y la juventud. De esta manera, buscan proteger sus ganancias e intereses mientras la población sufre con el ajuste fiscal y los recortes en salud y educación.
La disposición a luchar en contra de estos ataques viene mostrándose en los cientos de ocupaciones y en las manifestaciones que recorren el país. La juventud viene mostrando que el camino para frenar los ataques solo puede ser la organización para la lucha. Es necesario que las grandes organizaciones estudiantiles como la UNE y la UBES rompan su parálisis y subordinación a la fallida política de conciliación de clases del PT y comiencen a organizar efectivamente desde las bases acciones de resistencia contra los ataques de los gobiernos. Es fundamental que la juventud se unifique con los trabajadores en una fuerte lucha en defensa del futuro y los derechos de los trabajadores, la juventud y el pueblo pobre de Brasil, en medio de una de las mayores crisis de este fallido sistema capitalista.
FUENTE: LID
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