Un oficial turco detenido tras el golpe de Estado.
Las autoridades de Turquía han cesado a 12.800 efectivos de la policía por su supuesta vinculación con los golpistas.
El Ministerio turco del Interior ha señalado en su comunicado que las suspensiones tuvieron lugar tras indagaciones realizadas por las autoridades sobre el fallido intento de golpe de Estado de julio, ha informado este martes el diario local Hurriyet.
El rotativo sostiene que entre los suspendidos hay también varios altos cargos y que la Dirección de Seguridad investigará a cada policía suspendido, que será a su vez despedido si se verifica su vinculación con las redes del líder opositorFethulá Gülen, al que Ankara acusa de dirigir la asonada militar.
Tras la intentona golpista, por la que perecieron más de 200 personas, alrededor de 35.000 fueron arrestadas para ser interrogadas y más de 17.000 de ellas ya fueron procesadas formalmente.
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